Siempre me ha parecido que las prendas de Vanessa Bruno ganan mucho viéndolas en persona y acercándose y tocándolas. Me pasa a veces que mirando las nuevas colecciones en Net à porter u otros sitios no hay nada que me rechifle y sin embargo en cuanto llego a la tienda voy como hipnotizada hacia algún vestido y no hay quien me separe de él. Bien, esto era verdad hasta que Vanessa Bruno y Lou Doillon se unieron. Gracias a la colaboracón de otros como Mark Borthwick o Stéphanie di Giusto, cada temporada Lou encarna a la perfección a la mujer Vanessa Bruno.
Es vanessabruno en estado puro, y transmite todo lo que esas fotos planas de las prendas no son capaces de decir. Me dan ganas de bailar, saltar, gritar y tirarme "a rolos". Que no paren.